Pedro Juan Caballero “Tierra de Nadie”
El ataque tipo comando, se registró en la madrugada de este domingo, alrededor de las 01 y 02 de la madrugada, cuando al menos 20 personas fuertemente armadas atacaron la sede del departamento de Investigaciones de Amambay, la intención de los criminales era rescatar al “nuevo líder” del Primer Comando Capital (PCC), Giovanni Barbosa Da Silva, que fue detenido al sábado por la policía Paraguaya.
En el momento del ataque, el criminal más conocido como “Bonitao”, estaba en la sede de Investigaciones de la Policía Nacional, el mismo fue detenido por agentes del Crimen Organizado en la zona de Ponta Pora, el “nuevo líder” del PCC, tenía un fusil de calibre 5.56 a la hora de su detención.
Según lo trascendido, entre las 01 y 02 de la madrugada del domingo, llegaron al menos 15 a 20 camionetas hasta la sede policial, con los integrantes del PCC, cuya intención era rescatar al detenido, en ese sentido, a los gritos y a los tiros exigieron la liberación de su líder.
En ese interin también, tres policías que circulaban a bordo de una patrullera por el lugar, fueron tomados de rehenes, y la patrullera secuestrada, los miembros del PCC intentaron ingresar a la sede policial, sin embargo, el acceso estaba bloqueado por otro móvil policial.
En el marco de esta guerra bélica, un ciudadano que estaba circulando por la zona, recibió un impacto de bala en la parte de la espalda, el mismo fue socorrido hasta un centro asistencial de la zona para su atención médica.
La expulsión de “Bonitao”.
Tras este episodio criminal registrado una vez más en PJC, el ejecutivo resolvió la expulsión del criminal a su país natal, ya que en Brasil, el hombre tiene proceso abierto por tráfico de drogas, armas y asociación criminal.
Bonitao, llegó al país para ocupar el puesto dejado por “GALAN” y otros criminales ya detenidos, según los datos manejados por las autoridades, el hombre fue enviado del Brasil a nuestro país para las conexiones de tráfico de drogas.
No obstante, tras el ataque de sus compañeros, el presidente de la República del Paraguay, Mario Abdo Benítez, vía resolución, decidió expulsar al brasileño. El hombre fue trasladado hasta Ciudad del Este en un aeronave y entregado a las autoridades del vecino país.
