Miércoles 24 abril 2024 11:54

¿En guerra contra el Capitán?

¿En guerra contra el Capitán?
Se ha iniciado una guerra médica y política contra el enlazado por el pueblo "Capitán". Todo estalló tras las declaraciones de la exrepresentante del SENACSA Graciela Russomando, quien aparentemente tendría parentesco con el el clan Ferreira.

Desde hace un tiempo las voces de varios médicos, así como de algunos sectores políticos se encuentran librando una batalla contra el nombrado por el pueblo como el “Capitán”, el ministro de Salud Julio Mazzoleni.


Esta situación se acentúo mucho más en la noche del domingo, cuando la ahora exdirectora del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (SENACSA) Graciela Russomando, manifestó en un medio televisivo su disconformidad con las líneas de acción del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPyBS), tratando al representante de la cartera estatal como una persona carente de ética. El mismo día la profesional que cuenta con un curriculum impresionante en su campo, por medio de un mensaje de texto renunciaba a su cargo y alentaba a su equipo.


Foto: Captura de pantalla


Mazzoleni no esperó para salir a respaldar a los funcionarios del Laboratorio Central 


Por otro lado, salió a luz que la doctora que prestó servicios en el ente público por 34 años, tendría parentesco con el clan de la familia Ferreira, quienes ahora se encuentran imputados y con pedido de encarcelamiento por hechos de contrabando, producción de documentos no auténticos y asociación criminal en contra del Estado Paraguayo, por medio de la firma Imedic S.A., tras la fallida compra de insumos médicos para Salud Pública pandemia del coronavirus.


Existen varios tenores y asuntos pendientes que resolverse, pero esta oleada de denuncias y contraposiciones repentinas contra el “Capitán”, también abren un abanico de posibilidades en cuestiones políticas y no necesariamente de interés sanitario nacional. Si bien en Ministerio de Salud debe responder por las compras realizadas pos sumas millonarias, al parecer existe una disconformidad “política” con el propio ministro, ya que en las últimas semanas ha esquivado los bombardeos provenientes del Senado, Diputados y algunos profesionales que se encuentran en contra de su accionar ante la pandemia del covid-19 

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