Octubre Rosa: La detección temprana del cáncer salva vidas

Al menos 500 a 600 paraguayas son diagnosticadas por año con este mal.

La salud es una de las mayores deudas del Estado con la población paraguaya, una de las mayores falencias dentro del ambiente sanitario es el cáncer, y por sobre todo, el mal mamario que sufren las mujeres y que se lleva millones de vidas femeninas en todo el mundo.

En nuestro país, la primera causa de muerte oncológica es el mamario, superando ampliamente al cáncer de útero que, a lo largo de la historia médica ha sido la de mayor incidencia todo el territorio nacional.  

En conversación con el doctor Marcelo Galli Romañach, Mastólogo y Cirujano Oncoplástico del Instituto Nacional del Cáncer (INCAN), menciona que la mayoría de las personas que sufren de este mal, son mujeres de 60 años para arriba, pero también existen casos en donde este tipo de cáncer se presentan a partir de los 40 o 50 años y que, además se existen casos excepcionales de pacientes menores a los 30 y 20 años. 

Marcelo Galli Romañach, Mastologo y Cirujano Oncoplástico del INCAN

 

“Lo más recomendable es que las mujeres puedan comenzar con sus estudios mamarios a partir del fin del desarrollo de la pubertad, es decir, a los 17, 18 o 19 años, con estudios de palpación, para la detección de glándulas anómalas para detectar anormalidades dentro de las mamas. Esto es importante ya que, si bien tenemos muy pocos casos de personas menores de 40 años con esta situación, aquellas que presentan la enfermedad de manera temprana tienden a desarrollar un cáncer mucho más agresivo”, expresó el médico.

Las campañas de educación sanitaria generan muy lentamente un cambio en la actitud de las mujeres para hacerse los autocontroles y acudir a los hospitales, en 20 años, esta situación ha avanzado muy poco, por lo que precozmente se crea una conciencia colectiva, pero de igual manera las mujeres siguen temiendo al diagnóstico, antes que a la enfermedad. En este sentido, los psicólogos apuntan que, a lo que más le temen las mujeres, es a la posibilidad de perder las mamas, lo que causa un daño muy fuerte e interno en la feminidad de cada una.

 

“Los casos subclínicos, la detección precoz es un método que sirve, pero en ocasiones se puede encarar mucho más rápido a la enfermedad. Existe una transmisión genética, eso es innegable y se encuentra demostrado que 1 de cada 10 casos se mantienen dentro de este marco, es por eso que lo recomendable para aquellas mujeres que tuvieron una madre que sufrieron del mal, puedan hacerse los estudios correspondientes al menos 5 años antes de la edad en las que sus madres fueron diagnosticadas”, expresó el profesional,

Cada año el INCAN diagnostica 500 a 600 casos nuevos, que se suman a las mujeres que ya están siendo tratadas. “Hay que recordar que sin importar el nivel en que se encuentre el cáncer 1,2,3 o 4, el alta de curación total recién se da luego de los 5 años del tratamiento”. De todos esos casos, muchos se encuentran es un estadío avanzado por lo que la mortalidad es del 50 a 60 por ciento anualmente.

El profesional oncológico refiere que lo más importante es que las mujeres comprendan que la mayoría de los nódulos que aparecen en las mamas son benignos, pero que los estudios deben realizarse para que en caso de que se dé la presencia de la enfermedad, pueda erradicarse con el tratamiento correspondiente”.

 

 

“En la actualidad el cáncer de mama es el que tiene más métodos de curas, ya que al ser uno de los males oncológicos más comunes en todo el mundo, se han desarrollado una gran cantidad de tratamientos”, concluyó.

Hoy día el cáncer de mama ya no debe ser un motivo de muerte para la mujer, la letalidad es controlable y curable según la biología patológica del tumor y con los controles incipientes, se puede lograr que la enfermedad deje de llevarse vidas en el mundo y principalmente en nuestro país.